. El programa de colaboraciones museológicas de la XIII Bienal FEMSA "Nunca fuimos contemporáneos" tuvo como concepto rector el desformalismo. Por un lado, éste evoca una escuela historiográfica, el formalismo y, por el otro, la relación montaje-desmontaje: un procedimiento de análisis crítico tanto de las formas artísticas como de sus significados en un marco museográfico específico. Lo que se pretendió fué producir un “efecto distanciador”, una mirada crítica para situar al espectador en una actitud analítica frente a las formas de la historia, sus instituciones, tradiciones, etc. Según la posición distanciada que asumen la curaduría y los proyectos artísticos de Nunca fuimos contemporáneos, se pretendió asumir la inevitabilidad de la mirada distante y, al mismo tiempo, aprovechar este alejamiento para “desformar” la realidad en una suerte de extrañamiento.

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Las colaboraciones museológicas tuvieron lugar en el Museo de Guadalupe, Museo Zacatecano, Museo Rafael Coronel, Museo Manuel Felguerez, Museo Pedro Coronel, Museo de historia natural UAZ y el ex templo de San Agustín, como curador asistente yo colaboré en la gestión, dirección y producción de proyectos de artistas como Eduardo Abaroa, Naomi Rincón Gallardo, Verónica Gerber, Antonio Bravo, Chantal Peñaloza, Ricardo Alcaide, Runo Lagomarsino, Mario García Torres, Cynthia Gutierrez, Javier Hinojosa, Ivan Krassoievitch, Caroline Montenant, Felipe Mujica, Diego Pérez García, Rita Ponce de León, Vanesa Rivero, Fabiola Torres Alzaga y Nicolás Robbio.