. Ritual para casarse

. Este ritual para comenzar una vida juntos consta de tres partes.

-La primera comienza individualmente, sembrando semillas de betabel en una maceta con su respectivo nombre. Luego, durante mínimo un mes, cada uno le habla a su maceta  todos los días (de preferencia coincidiendo con el riego), sobre quien es, como se llegó hasta ese punto de la vida, en resumen, hablar del pasado personal.

-La segunda parte consiste en sacar las plantas de la tierra, lavarlas y macerarlas enteras para sacar su jugo, colarlo y después escribir con él un texto sobre los planes, sueños y metas personales en una hoja de papel encerado.

-La tercera parte, el día de la ceremonia, las hojas de papel dobladas se depositan en recipientes separados con agua calientita y endulzada para hacer una infusión con el jugo de betabel que hay en ellas. Posteriormente se vierte la infusión de cada uno en un mismo cuenco del que beben los dos.
 

 . Las plantas son sensibles a diferentes estímulos externos, como las vibraciones del sonido, hablarle a una planta modifica su crecimiento, hablarle de ti, tu tono de voz, las palabras exactas hacen que la planta crezca de una manera particular, te llevan grabado de alguna forma en ellas.

 La planta del betabel representa la vida vivida, el pasado, quien se es.

 

 Su jugo como sangre, es la esencia de la vida, con esta se imprime en palabras un futuro deseado, individual, como es la experiencia de vivir.

 

 En la infusión calientita de este jugo se toma la esencia del otro mezclada con la nuestra, en el presente, para comenzar juntos una etapa nueva, comerse el uno al otro y comerse a sí mismo, es una referencia al amor.
 

Este ritual fue creado específicamente para la boda de María y Uriel pero es replicable, en caso de serlo se debe citar como: “ritual de María y Uriel” junto con los créditos del autor.

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